Una cafetería llena de antigüedades, una tarde de invierno, un grupo de niños, olor a galletas recién horneadas…
¿Podéis sentirlo?
Así es cómo comienza nuestra historia de Navidad para Massimo Dutti…
Hoy os traigo una colaboración muy especial, como lo son todas las que se hacen con cariño y en las que me dejan formar parte activa para que pueda darles forma, recrear momentos e imaginar espacios en los que contar historias. Que un grupo como Massimo Dutti confíe en mi para dar forma a un reportaje de fotos para Navidad, es sin duda todo un honor.
Pero volvamos a la historia…
La de hoy se desarrolla en el que es probablemente, el lugar con más encanto de Madrid, Il Tavolo Verde. El olor a café recién hecho, los muebles antiguos y la sonrisa de Martina y Leo inundan el espacio.
Es una tarde fría de invierno, un grupo de amigos se reúnen en este antiguo café para aprender la receta secreta de las galletas de Navidad de Martina.
No se ven mucho, no todos viven en la misma ciudad, por eso decidieron juntarse 4 veces al año, una por cada estación, y prometieron no faltar nunca a la cita. Como si de un pequeño club se tratara, entre los 7 planean y dan forma a cada una de las citas y hoy por fin ¡ha llegado la de invierno!
Poco a poco, el grupo de amigos se va juntando en su lugar preferido. Dejan sus abrigos al entrar, y mientras esperan a que lleguen los demás, unos juegan, otros leen y otros ayudan a Martina a preparar todo lo necesario para el taller de galletas. Son como una gran familia, cada uno a lo suyo, mientras en el ambiente suena The Christmas Song (dadle a Play para continuar).
¡Ya estamos todos!
Es su fecha más esperada y ninguno quiere perdérsela por nada del mundo.
Enseguida se remangan y se ponen manos a la obra. Martina les ha preparado la mesa central, la de madera algo desvencijada con muchas historias detrás que contar, la misma que esa tarde podrá unir una más a sus patas.
Entre risas, harina y buena música, sus manos van dando forma a la masa, y las primeras galletas comienzan a hornearse dejando un olor irresistible en el ambiente…
Tan irresistible que alguno no puede evitar lanzarse a por ellas antes de que estén todas terminadas.
Y con esa pinta, ¿quien no?
Y es que si hay un plan mejor que cocinar galletas de Navidad con amigos, ese es sin duda, ¡comérselas con todos ellos!
Y dicho y hecho…
De la cocina pasaron a su rincón favorito. Ese donde siempre que visitan la capital, les gusta tirarse en la alfombra a leer cómics en verano, jugar al escondite o sentarse en el banco a contarse sus cosas mientras los mayores se toman ese café interminable.
Y allí, tumbados en la alfombra favorita de Martina y rodeando el plato de galletas, juegan a ver quien es el que aguanta más sin coger ninguna.
Todos pierden… 🙂
Entre galleta y galleta, las historias y las batallitas van cayendo. Hablan de lo que pedirán a los Reyes este año, su peli favorita, lo que han soñado la noche anterior o lo que quieren ser de mayores…
La tarde ha pasado rápido. Todo el año esperando su gran plan, y sin apenas darse cuenta ya llega a su fin…
Habrá más días, más quedadas y más planes, pero el de invierno tiene algo que lo hace más especial que el resto. Será la magia de la Navidad o la magia de Il Tavolo Verde, o quizá la mezcla de ambos. Sea lo que sea este pequeño grupo de amigos sabe donde está lo bueno.
Ya sólo queda esperar a primavera para reunirse de nuevo en un plan que mañana mismo comenzarán a pensar.
¡Que la ilusión y las risas nunca se acaben!
Mil gracias a Massimo Dutti, sobre todo a Mireia, por confiar en mí y darme libertad para dar forma a la historia.
A Sara Lobla, autora de todas las fotos, quien supo capturar la esencia de esta quedada tan especial.
A María, Paula, Mery y todos sus peques por hacer que la historia fuera posible y que por una tarde estos 7 fueran amigos de verdad. (Y si les dejamos un par de horitas más, no dudo que lo habrían sido) ¡Qué manera de disfrutar!
Y a Martina y Leo, el alma de Il Tavolo Verde por su predisposición, simpatía y por hacerlo siempre todo tan tan fácil.
Con un equipo como vosotros, ¡las cosas sólo pueden salir bien!
Continuará…
Enhorabuena por la colaboración, primero por la marca y segundo por el resultado.
Es una historia preciosa
Enhorabuena Bea! Las fotos son preciosas pero, sobre todo, me encantan porque no son las típicas de catálogo.
Genial, como siempre!!!
Precioso reportaje lleno de sensibilidad. A mi me lleva a mis Navidades pasadas a esa nostalgia que cada año me entra por volver a ser niño yy esprsr las vacaciones con tanto ansia que no te deja dormir, hacer galletas (y comerlas sin parar), asar castañas con los amigos…
Gracias por hacerme recuperar esos recuerdos
¡Enhorabuena Bea! ¡Qué maravilla de post! Consigues que al leer la historia una se teletransporte a la infancia dónde se vivía esta época de forma tan especial…ah! y Martina está preciosa! Un abrazo.
Preciosas fotos!! Me han entrado ganas hasta de liarla con las galletas y los peques aunque luego me pongo a pensar en la ultima vez y lo mío no fue ni tan idílico ni tan fotografiable jajajaj así que me temo que se va a quedar sólo en esas ganas.
alguien dijo que la navidad lleva olor a galletas! me encanta! felicidades por esta colaboracion, y por esta esencia.
Un entorno magico, y unas fotos ideales.
un abrazo.
Maravilloso, Bea. Me ha encantado la historia, el ambiente, las imágenes, los niños ¡y las galletas! Un beso.
Madre mia Paula (mamatrendy) tu niño el mayor va para modelo, me encanta en la ultima foto, como sabe posar, está monisimo, la ropa le queda como un guante ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Si solo digo que me ha encantado me quedo corta!! Maravillosa historia y que sitio tan mágico, o es que las fotografías son increíbles… Tardes como estas son las mejores, un planazo! Besos
Muy chula la historia, Bea! 😉
Será, sin duda, la primera de mucha colaboraciones con esta y otras grandes marcas… Ya lo verás!
Un abrazo grande!
Qué sepas que he leído el post con Nat King Cole de fondo y, la verdad, es otra manera de leer… ¡Qué maravilla! ¡Qué buen rollo, calidez y sensación de volver a la infancia! Hasta parece que saboreas las galletas.
Me ha encantado. Y los niños son geniales.
¡Muchas gracias!
Que bonita historia de Navidad! Que bonitos son todos los peques y las fotos una pasada! Este color, ambiente… casi puedo oler las galletas desde aquí 🙂
Enhorabuena una vez más Bea! Una y mil veces que espero dártelas!!!
Un besazo!!
Que bonita iniciativa y que bonitas fotos! Estas cosas las van a recordar siempre seguro! 🙂
Qué guapos van todos los niños y qué pintaza tienen las galletas.
Sin duda un día muy especial para ellos y para los mayores que les acompañaron.
Un beso Bea.
Me acabo de enamorar del sitio. Quiero una casa así para mi para toda la eternidad, en medio del campo! Es absolutamente inspirador. El post es precioso, que envidia! Tu hija tiene una suerte inmensa de disfrutar de todas esas experiencias… Las fotos son espléndidas, enhorabuena a la fotógrafa. Como siempre, gracias por este ratito de transportarnos a un lugar al que parece que hayamos asistido. Perfecto, como siempre. Un abrazo Bea.
Qué cuento de Navidad más bonito!!!! Me ha encantado. Un grupo de amigos precioso ;-).
Besos!
Pero que historia tan bonita!! Una gran inciativa y un gran reportaje!! y los niños geniales!!! Guapisimos!!
¡¡Enhorabuena por esta preciosa colaboración!! Para mi gusto ha quedado perfecta. Vamos, que los de Massimo Dutti han acertado de pleno contanto contigo. Deseando que llegue la primavera para ver la segunda parte 🙂
Precioso reportaje!!! Tiene alma esta sesión de fotos… Soy compradora de massimo dutti para mis hijos y me ha encantado. Gracias y muchos bss
Muchísimas gracias a todas! Si con ellos da gusto, con vosotras todavía más!! Un besazo enorme
Que bonito post. Yo descubrí Il Tavolo Verde por casualidad hace un par de semanas y efectivamente Martina no dejó de sonreír ni un momento. Y ya cuando me dispuse a ir al baño, descubrí la «trastienda» maravillosa, y ahí ya me quedé completamente hipnotizada del sitio. Que preciosidad y que ambiente más relajante e inspirador. Me sacó una sonrisa durante todo el tiempo que estuve en él.
Un plan mágico en un sitio mágico.
De mis preferidos. Máxime sabiendo que Leo es argentino!!!
Precioso Bea, de verdad, todo! Es uno de mis posts favoritos!!
Que fotos tan preciosas y la historia, me ha gustado muchísimo, y es que además Il Tavolo da tanto juego, a Saioa le encanta, y no es para menos
Es precioso, enhorabuena. El reportaje, la historia las fotos… ¡Me dieron ganas de organizar una quedada!! Mis mas sinceras felicitaciones ♥
http://andureando.blogspot.com.es/
Te has superado a tí misma 🙂 . Es fantástico este reportaje. Feliz Navidad!