Let’s make a face¡
Con imaginación y un marco, aquí tienes tu retrato
Aunque nos quedan ya algo lejanas, las vacaciones de primavera dieron mucho de sí, y nos permitieron dedicarle un poco más de tiempo a hacer algo que nos encanta: mancharnos las manos y dar rienda suelta a la imaginación.
En casa teníamos desde hace tiempo unos bonitos blocs de dibujo que simulan marcos de cuadros, y que ya habíamos utilizado algunas veces para pintar y decorar con los dibujos la habitación de los niños.
Me acordé de un taller que organizó Molly Meg en su pop up store de Anthropologie en Londres, y decidí hacerlo yo también en casa. Usando las hojas de esos mismos blocs, la idea era que los peques hicieran un autorretrato en forma de collage, con recortes de revistas y distintos materiales.
El collage es un excelente medio de expresión de la creatividad infantil, porque permite a los niños familiarizarse con distintos elementos y soportes, a través de las formas, los colores, los materiales, los diseños…, y también porque sirve para desarrollar –a través del corta y pega– la motricidad fina de los más pequeños.
Además es, como bien pude comprobar, una estupenda oportunidad para que se relajen y disfruten.
La idea inicial era que hicieran un autorretrato. Pero, aunque esa era mi intención, mis hijos se emocionaron tanto con la actividad que decidieron ir un poco por libre y hacer retratos divertidos, sin más.
Como el objetivo principal era disfrutar, no iba a ser yo quien les llevara la contraria…
Lo que hice fue prepararles algunos materiales, como las hojas con los marcos donde hacer su collage, distintas formas de cabezas y manos recortadas en papel de colores, camisetas y pantalones recortados en tela, ojos, narices y bocas sacados de revistas, lana y papel de seda para simular el pelo, gomets, y otras cosas que tenía por casa.
Lo bueno del collage es que permite utilizar cualquier material u objeto que tengáis y que pueda pegarse con facilidad (botones, telas, cartón, cartulinas, pompones, plumas, corcho, lazos…).
Además de pegar dándole forma libre a los dibujos y, si ya están en edad, los niños también pueden recortar sus propias formas. A los míos les encanta usar las tijeras (para ellos supone un gran logro¡), así que disfrutaron de lo lindo recortando.
Y el resto ya es cosa de ellos. Os puedo asegurar que les gustó tanto y lo pasaron tan bien que tuvimos que repetir la actividad otro día.
Ahora tenemos retratos para empapelar la casa, pero lo importante es que pasaron un rato mucho, Mucho divertido¡
¡Os quedaron realmente preciosos! Me encanta usar el collage con los peques porque vale casi todo: hace poco hicimos esta misma actividad pero sobre la mesa les puse espaguetis, lentejas, macarrones, clips, pompones, cartón, lana, arandelas, tapones de plástico… y el resultado es completamente distinto 😉
Me encanta la idea de usar lentejas, espaguetis… Tengo pendiente hacer algo con ellos así.
Qué idea tan buena!!!
Enhorabuena por el post y por las fotos, son increíbles.
Muchas gracias Susana. Me alegro de que te guste.
Me encanta la idea, la llevaremos a cabo.
Me encanta la actividad!! Muy creativa y donde se potencian un montón de áreas cognitivas y motoras de los peques. El resultado es genial. Un beso.
Gracias¡
Que gran idea!!
Todo esto me lo voy archivando, por que dentro de un tiempo me hará mucha falta!! 🙂
Un abrazoo
que divertido! me ha encantado Deli! y las fotos geniales
besotes
Me ha encantado tu post! una idea bárbara! A mi hija mayor no le gusta demasiado dibujar, porque dice que no lo hace bien; seguro que el modo collage le anima a ir perdiendo el miedo y a pillarle un poco más el gustillo!
Muchísimas gracias por tus ideas! son fabulosas. En breve voy a hacer la del plástico mágico!
Un abrazo
Una idea muy muy divertida, me ha encantado. Felicidades!!!