Recreando momentos especiales con un diorama de verano
Una de las cosas que más nos gusta hacer en casa y que ya os comenté en el primer post de Mucho divertido¡ es representar cada nueva estación del año con alguna manualidad, de forma que los niños reconozcan los cambios que se van produciendo en su entorno.
Las maquetas o los dioramas son, sin duda, una de las formas más divertidas para recrear escenas, ya sean de un viaje o de la vida cotidiana o de aquellos momentos especiales que queramos recordar. Además, se pueden hacer en cajas de madera o de cartón, en latas, en tarros cristal, en marcos de fotos… y utilizar cualquier tipo de material o de objeto que se nos ocurra para ello. Si todavía nos los conocéis, os recomiendo ver los preciosísimos dioramas que hace Begoña de Tea on the Moon para sus hijos, fotografiados para Kireei n. 4, y que nos sirven de inspiración para nuestra maqueta.
Viviendo en el Mediterráneo, nuestras vacaciones de verano son sinónimo de playa, sol y castillos en la arena, así que este año no podíamos dejar de hacer un pequeño diorama con todos estos elementos.
Este verano, además, ha sido más especial aún porque mi niño pequeño ha aprendido a nadar, por lo que hemos elegido una escena de mar y de playa para recordar nuestros días estivales.
Para este diorama utilizamos elementos básicos: una caja de madera (la típica caja de botellas de vino), papeles estampados y lisos, washi tape de distintos colores, pegamento, arena de playa y algunas conchas que recogieron los propios niños un día de playa.
Además, añadí unos clicks con los que representé a mis dos niños.
Para hacer la orilla y la pequeña montaña sobre la que se erige el faro, utilicé goma eva de color beige; le di la forma deseada, la pegué y luego la cubrí con cola para fijar sobre ella la arena.
El faro, que siempre acecha nuestra costa, es un sencillo cilindro de cartulina con tiras rojas de washi tape.
Para el mar, usé diferentes cartulinas de tonos azules y blanco, unas pegadas sobre otras de forma que dieran sensación de profundidad.
Y, dos cosas que no podían faltar en nuestro escenario: los barcos que siempre navegan en el fondo mientras nos bañamos, y las avionetas que a menudo sobrevuelan la costa y que los niños se emocionan al ver.
El toque final y marino de la maqueta se lo dan algunos restos encontrados en la orilla, conchas y una estrella de mar.
Os animo a que hagáis un pequeño diorama de vuestras vacaciones.
Seguro que será un magnífico recuerdo para los pequeños de la casa y pasáis un rato Mucho divertido¡
#muchodivertido
Que bonito!! Le ha quedado precioso
Es genial!!! Me encanta!!!
Deli, qué pasada, me encanta como te ha quedado!! Beso! 😉
Me encanta esta sección!!
Gracias por tus ideas Deli, ya lo tengo en mi lista de proyectos.
Gracias!!
Es súper bonito, me encanta la idea y ha quedado precioso.
Precioso, como siempre Deli!!!
¡Pero qué monada! Me acaban de entrar ganas de hacerme uno 😉
Es una preciosidad increíble, de veras que me encanta, queda precioso e impresionante, muy bonita y cuidada ejecución.