La pasión por la música no sé si hereda, lo que si sé es que se transmite cuando la vives, la compartes y la disfrutas con los demás.
No recuerdo cuando empezó mi amor incondiconal por la música pero si que tengo un montón de recuerdos desde pequeña que me relacionan directamente con ella.
Recuerdo los viajes en coche en familia escuchando los casetes de mi padre y como, cuando fuimos creciendo, yo me preparaba mis propias cintas y entonces ya no me importaba cuanto tardásemos, yo iba feliz con mis canciones tumbada en la parte de atrás de un Volvo familiar.
Ni que decir cuando ya empezamos a viajar con amigos. Siempre preparábamos cintas y cd’s con nuestras canciones preferidas de esos años, y así cada viaje pasaba a tener su propia banda sonora.
Recuerdo levantarme los sábados por la mañana y poner Los 40 para escuchar toda la lista de principio a fin, mientras estudiaba o hacía cualquier tarea de la casa. O verlo en la tele presentado por Sira Fernández, con quien muchos años más tarde me encontré gracias a este blog. Quien me lo iba a decir a mí… Yo que era tan fan de ella de pequeña, y de pronto ella seguidora del blog…
Me encantaba cualquier programa de música que pusieran en la tele; desde Rockopop con Beatriz Pecker al 7º de Caballería de Miguel Bosé, pasando por cualquiera de esos que recordaban toda la música pop española como ¡Qué noche la de aquel año!
Me tragaba videoclips uno tras otro. Me daba igual el grupo. Me gustaba ver las historias que contaban, podía pasarme las horas muertas viéndolos, y todavía a veces lo hago. Cuando era peque los veía en Canal + en abierto y cuando iba a casa de una amiga que tenía MTV, ¡me parecía todo un lujo!
Por las noches, me ponía cualquier emisora de música, y la tenía siempre de fondo. Mi madre me decía que no era posible estudiar con música, y tenía razón, pero siempre me costaba apagarla y pensaba: «venga, una canción más y la apago». Pero la siguiente también me gustaba, y así una tras otra, y nunca apagaba…
Cómo la mayoría de las canciones no las entendía, con mi amiga Ana nos poníamos a intentar sacar algunas letras y luego traducirlas. Con la llegada de internet todo eso facilitó el trabajo, y ahora me encanta mirar siempre las letras de las canciones si no entiendo bien lo que dicen y así saber lo que canto.
Los conciertos me dan la vida, siempre lo han hecho. No recuerdo cual fue el primero de todos, probablemente alguno de unas fiestas de pueblo de vacaciones con mis padres, pero la sensación de vivir la música en vivo, es algo que necesito cada cierto tiempo. Soy muy groupie y me apunto de cabeza a cualquier festival o concierto que se me ponga por delante (supongo que Martina tenía a quien salir). Si hubiera vivido en la época de Los Beatles, estoy segura de que hubiera sido una de esas fans histéricas. Cuando estoy de concierto, me dejo llevar y lo doy todo, dejando atrás la vergüenza y compostura 🙂 .
Cada momento especial de mi vida, tanto bueno como malo, tiene una banda sonora, y es increible la de detalles que me vienen a la cabeza cuando escucho cada una de esas canciones…
El primer amor, las salidas con tus amigas, los viajes de ski, nuestros primeros veranos juntos todo el grupo de amigos, los campamentos, la canción que escuché en la radio mi primer dia de universidad, la música de mis actuaciones de gimnasia, las que bailaba con mis hermanos en el salón de casa, los viajes en coche, la que sonaba cuando conocí a Tacho, la que estaba en mi cabeza cuando nació Martina y la que le puse a Lola al nacer… Cientos y cientos de recuerdos que siguen en mi cabeza intactos gracias a la música….
Nunca he sido muy buena memorizando según que cosas, pero en cambio tengo una increible memoria musical.
Y dado que soy una persona, digamos, sensible; muchas veces no puedo evitar decirle a la gente que me he acordado de ella cuando escucho una canción, aunque haga mil años que no hablamos.
Me parece que es la parte más bonita de la música, te conecta a momentos y a personas que formarán parte de ti para siempre. Asi que, ¿por qué no decirlo? Saber que alguien del que hace mucho que no sabes – o con el que hablaste ayer- está pensando en ti gracias a una canción, me parece una manera preciosa de reconectar. Una de esas cosas buenas que nos da la música y la tecnología. ¿No creéis?
En uno de mis primeros post en 2011 escribía: «No puedo vivir sin música, me gusta tenerla en todas partes. No me imagino una vida sin música al igual que no me imagino una película sin banda sonora».
Y así sigue siendo, desde por la mañana que me levanto y pongo Spotify hasta por la noche escribiendo los post para el blog, me paso el día con la música puesta y eso es algo con lo que irremediablemente han crecido Martina y Lola. Y lo han hecho con mi música que es la que normalmente escuchan, y me encanta verlas cantar, no sólo sus canciones de niños, si no muchas de las que yo escucho.
Disfruto como loca conduciendo si es con buena música, en Chicago recuerdo que daba algunas vueltas más a la manzana antes de aparcar, hasta que terminaban las canciones que me apetecía escuchar. Y con las enanas me encanta ponerla un poquito alta y cantar a pleno pulmón.
Toda esta pasión por la música supongo que se contagia y a mi me encanta compartirla con ellas. Por eso cuando puedo llevarlas a algún concierto que sé que les puede gustar, no dudo en hacerlo, simplemente porque me apetece disfrutarlo con ellas.
Y eso fue lo que me llevó a llevar a Martina conmigo el pasado viernes al conciertazo de Zaz en Madrid. Es una de las artistas que suena mucho por casa y en el coche ultimamente, y no es raro encontrártela chapurreando como puede la canción de Je veux sin tener ni idea de francés.
Y sólo por estar con ella escuchando en directo la canción que hacía 3 años le había dedicado en el blog, mereció la pena. Por eso, y por ver su cara de felicidad con los primeros acordes de Je Veux y Sur le ciel de Paris, sus favoritas.
Otro momento más que guardar, no sé si en los recuerdos esenciales, como dirían en «Del revés», pero sí en especiales sin duda.
Y no se me ocurre mejor manera que terminar el post que con una canción de Zaz, por ser la causante de que hoy escriba este post sobre mi pasión por la música.
¡Disfrutadla!
PD: Todas las preciosas fotos son de mi cuñado Victor que se vino junto a mi hermana al concierto.
Un post muy chulo
Tampoco sé si la pasión por la música se hereda o se transmite, no sabría contestarte. Lo que si te puedo decir es que leyendo tu post me he sentido identificada en todo lo que pones que me pasaba la vida escuchando música, que cada recuerdo importante de mi vida va ligado a una canción, pero… He dejado de hacerlo! Y no me he dado cuenta hasta ahora. Sigo escuchando música en el coche pero en casa he dejado de hacerlo sin darme cuenta. Esto hay que remediarlo
Es que Zaz es mucha Zaz. Estuvo el jueves en el Jazzaldia de Donostia y fue todo un conciertazo. Para mí la música también es esencial; una para cada estado de ánimo, en la ducha, cuando desayuno, cuando me visto, en el coche…
Me ha encantado tu entrada, y Zaz es también la cantante favorita de mis hijas! Por suerte disfrutan de la misma música que nosotros, incluso hemos ido a París para que conocieran su famosísimo ciel!!!
Totalmente de acuerdo contigo e identificada… Para mi las canciones son como los olores… Me evocan situaciones vividas, viajes, y personas y por supuesto estados de ánimo. García por el post!!! Besos
No es que me sienta identificada con tu post, es que prácticamente me has descrito a mi. Sólo que en vez de una Volvo, en mi caso era un Malibú color gris. Yo tampoco puedo vivir sin música. Y que cierto es como nos conecta, a tal punto que en mi caso, escuchar una canción que está cosida a un momento de mi vida o auna persona, me hace revivir las emociones de ese momento. Revivir de forma perfecta.
Un besote y gracias por este post, sobre mi. jejeje.
Querida Bea,
Te leo desde hace muchos años, aunque no suelo comentar. Pero hoy el post me ha tocado. Ahora mismo estoy en Inglaterra, de estancia postdoctoral. La semana pasada decidí hacerme Spotify Premium para poder escuchar toda mi música sin conexión en el laboratorio… ¡y fue la mejor semana desde que llegué hace tres meses! Quizás fuese casualidad…
Para asociar momentos a música, estoy haciendo una lista de reproducción por meses y voy añadiendo las «canciones de ese mes». Y es de verdad precioso ver cómo me conecta con los primeros días, con la gente que voy conociendo, con las visitas a España a ver a mi familia y a mi novio… En fin, ¡pura magia!
¡Qué viva la música! Añadiré esta canción de Zaz (a la que escuché por primera vez en Francia hace 2 años) a mi lista de julio que termina 🙂
¡Un beso!
Una de las cosas que más me gusta de tu blog, Bea, es lo bien que sabes contar experiencias y cómo consigues que la gente empatice con tus experiencias. Porque muchos de tus posts, cuando los lees piensas, esto podría haberlo escrito yo, pero no. Tú lo cuentas como nadie. Consigues expresar muchas vivencias cotidianas como algo realmente especial. Y por eso nos gustas tanto. Pues eso, este post podría haberlo escrito yo, pero NO. Fantástico y emocionante, mis recuerdos también. un besazo!
Totalmente identificada Bea. De hecho de pequeña me preguntaba porque no ponían música por las calles!!! Creo que esa pasión se hereda. Yo, de mi padre, que igual escuchaba a los clásicos que a The Cure. Le agradezco muchísimo que me enseñara todas las posibilidades, que no fuera fanático de un solo grupo o estilo, así en mi memoria tengo miles de canciones, desde Abba hasta Pet shop boys, Muse o Bunbury. Gracias a la música, además, aprendí inglés desde muy temprano. Yo soy ya viejuna y las letras a veces ni siquiera venían escritas en los casettes, así que había que sacarlas a fuerza de oído y diccionario. Music was my first love.
Estoy totalmente convencida que (si no se hereda) se transmite ese amor por la música. Mi padre es profesor de música y toca varios instrumentos y siempre nos transmitió ese amor y pasión por la música desde bien pequeñas. Aunque probablemente no por la música que él tanto venera, pero sí que ha conseguido transmitirnos a las tres hermanas una sensibilidad y amor por ella.
Yo no paso un día sin escucharla y según el día escucho un estilo u otro, me encanta recordar canciones especiales o aquellas que me recuerdan momentos importantes de mi vida… Esto inevitablemente hace que mi peque se involucre también cada día escuchando música , a pesar de que a veces ya me deja claro que hay canciones que a ella no le van mucho… 🙂
Sabías que la memoria musical al parecer es la última que se pierde? Hay estudios que lo afirman con personas enfermas de Alzheimer, que a pesar de no reconocer a sus hijos o a sus parejas sí recuerdas emociones que les transmiten determinadas canciones. Me emociono cada vez que recuerdo esa noticia, el poder de la música en nuestro estado de ánimo es increíble!
Un post precioso! 😉
Identificada palabra por palabra. No hay nada más evocador que la música.
En casa también oímos mucho a Zaz. ¡Qué envidia me habéis dado!
Pero Bea!! TE gusta ZAZ?! No sabía que también sonaba por tierras españolas! Que buen gusto musical! besitos guapa viva la música!
Yo no soy muy musical, más bien poco, pero mi marido si y es increible como se lo ha transmitido a la peque. Desde bien pequeña veía videoclips en la tele, cantaba a pleno pulmón cualquier estrofa y bailaban juntos todo los acordes. A punto de cumplir tres, la peque lo primero que hace al llegar a casa es encender el iPod de su habitación y bailar con su micrófono improvisado con un trozo de un bastón que andaba por casa.
Me ha encantado este post, como todos, tienes alma para contar historias y comunes, muy identificada con tus palabras, yo también tengo millones de recuerdos con la música, y tambien era de los videoclips. Me hacía cintas de vhs con mis preferidos jajajaja, y soy de las que cuando estas hablando, alguna palabra me recuerda a alguna canción y tienes que cantarla jajajaja. No conozco a esta artista ZAZ, pero seguro que con tu oido musical, me gusta. Gracias por la recomendación y por con tus palabras evocarnos recuerdos esenciales 😉
pd: la acabo de escuchar y como no conocía yo a esta chica, con lo que me gusta a mi la musica francesa, es muy edith piaf. Me encanta
Si que es bonita la canción!! emociona! Gracias por el descubrimiento , )
Yo soy un desastre musicalmente a pesar de haber estudiado 8 años de música y piano.
Estaría genial que hicieses una sección musical mensual para los no introducidos!
Un abrazo, Joanna
http://www.experienciar.es
Me ha encantado tu post! En mi casa mi padre tenía cintas de videoclips que he visto mil veces, mi madre lo mismo escuchaba Maria Callas, Cranberries, Rocío Jurado o Bunbury así que siempre he escuchado de todo y no me defino con un único estilo pero si tengo una canción de cada verano, de cada viaje, para cada persona y cada momento de mi vida. Y me he acordado de mi hermana y yo en el coche, jugando a decir palabras y cantar una canción que la tuviera, de toda la música que elegí para mi boda, de las canciones que cantaba embarazada o de las de Izal que cantan mis hijos mientras pintan, y creo que si que se hereda, y haré lo posible porque así sea. Gracias Bea!
jajajaja, así que si un día me encuentro a una morenaza cantando a voz en grito dentro del coche parada en un semáforo y no soy yo, sois vos! 😉
Eras también de las que grababan la radio para tener los hits del momento?? El primer modo que recuerdo de piratería, rudimentaria, pero piratería al fin y al cabo.
Te entiendo perfectamente. Yo le debe mis estudios de periodismo al señor Tony Aguilar, ahí es ná!! Muy, muy, muy identificada.
Besos!
La música habita en cada instante de mi vida. Cada domingo, desde hace tres años, les escribo un correo electrónico a mis amigos y a mi familia que se titula «Canción de domingo». Allí les cuento un poco cómo me ha ido la semana, cuáles han sido mis pensamientos y qué canción me ha acompañado esos días. Me suelo enamorar de las canciones, las que me gustan las oigo mil veces y no me canso de cantarlas, de recomendarlas, de vivirlas… Cada domingo les mando un enlace a la música que me ha apasionado. Zaz ha aparecido varias veces en mis correos domingueros. Me ha encantado leer tu post.
Dejo aquí una recomendación, uno de esos grupos que me hacen soñar y cantar a pleno pulmón.
Son Nouvelle Vague y su tema «Blister in the Sun»: https://www.youtube.com/watch?v=xYH0zhll0H0
Beso musical.
Me encantó este post, creo que porque me sentí MUUUYYYY identificada. Siempre he creído que la vida, como las películas, también tiene banda sonora. Y como los olores o los sabores, los sonidos nos transportan a momentos muy específicos y eso me encanta. No conocía a ZAZ, pero ya mismo entra a formar parte de mis playlists porque me gustó mucho. Gracias por presentármela. Un abrazo
Bea!… Esta claro que esa manera de sentir nos conecta a todas las que estamos dejando un trozo de nuestra emoción aquí, escrita.
Un post de los bonitos, de los de dentro, de los que se cuecen a fuego lento sin más ingredientes que los que una misma tiene en su propia e íntima despensa: un post que, si no se siente, no se puede escribir.
La B.S.O de nuestras vidas podría dar lugar a miles de películas, cortos, documentales, pequeños spots. Esa misma banda sonora es la que nos ayuda a dar consistencia al pasado, al trenzarse con nuestros sentimientos, nuestros sentidos y nuestros recuerdos. Esa amalgama pétrea fragua y es indestructible; se diría que pasa a formar parte de nuestra genética, de nuestra vida microscópica, ocupando un lugar que se mantiene a salvo del paso del tiempo y del olvido: unos cuantos comentarios antes que éste, IRENE FOMBELLA, menciona el impacto de la música en enfermos de Alzheimer… Si yo te contara cómo reaccionan los ancianos afectados por cualquier tipo de demencia ante la música, su música, la de SU tiempo!… Ese brillo en los ojos, esas sonrisas, ese cambio de expresión, de actitud, postural, emocional. Te llegas a preguntar: ¿cómo una persona que no recuerda qué es un tenedor ni para qué sirve, es capaz de cantar, de memoria, entera, la canción «Clavelitos»?…
Tienes razón, Bea: yo tampoco podría vivir sin música y también, desde siempre, le he transmitido a Sarah esa necesidad, incluso desde el embarazo, así que Sarah canta y canta, siempre, a todas horas canturrea, escucha música, es una máquina de memorizar letras de canciones, las descubre, las vive, las comparte. La música nos une y nos lleva en volandas hasta infinitos recuerdos de nuestra vida en común: es nuestra sólida banda sonora.
… Y también como tú, Bea, me gusta compartir esos momentos especiales y únicos con ella: en junio actuó Jorge Dréxler en Vilanova, cerca del pueblo donde vivimos nosotros desde hace 4 años. Fuimos las dos, juntas, como dos groupies (igual que tú) y fue INCREÍBLE, perfecto, SUBLIME… La groupie serena y sosegada, contenida, era mi hija; la que silbaba, aplaudía a rabiar, bailaba y lo daba todo (cómo te entiendo, Bea), te podrás imaginar quién era!..
Bailemos, dejémonos llevar por la música… de la vida! Gracias por estos ratitos. Un abrazo grande!
Precioso post,beuki!y muy bonita la cancion,no la conocia!
Y estoy de acuerdo:la musica te transportaa determinados momentos y los hace revivirlos
Precioso post. Yo también ando con la música puesta a todas horas.
Creo que cada uno es protagonista de su propia «pelicula» y ¿Qué sería de una película sin música?
Espero que pronto armes otra playlist en Spotify, que gracias a ti he descubierto excelentes artistas.
Besos desde Argentina.
Sol.
YO descubrí a Zaz de casualidad hace un par de años y aproveché que mi marido viajaba a París para encargarle el disco. A mí la música me gusta, pero soy muy vaga para tener las canciones ordenadas, conectarme a sptify o guardar las canciones en el móvil. De hecho, tenía una lista buenísima que perdí porque no supe hacer una copia de seguridad del móvil. Es lo que nos pasa a las que seguimos en la edad de piedra .(
Aprovecho el tema para pedirte que nos «regales»· un recopilatorio de canciones, esas que no te cansas de escuchar!
En cuanto a lo de las niñas, me da pena que por mi propia dejadez, mis niños no disfruten de la música tanto como deberían… a ver si consigo organizarme con esto de mp3 (o ya es mp4?) arjjjjjjj, con lo fácil que era poner el CD y darle a Play…
Gracias, me ocurre algo muy parecido, la música me transporta mentalmente a estar con gente que está lejos o que incluso no están, me pide que les agradezca haber formado parte de mi vida, me devuelve a la infancia cuando trasteaba en la habitación de mi tío buscando sus discos de Alaska, Mecano, El Ultimo de la Fila, …. Es un gusto conducir cuando estás acompañada de gente tan buena y cuando cambias Los Cantajuegos por Dido o Adele no hay protesta… Gracias también por acercarme a Zaz, será mi próxima adquisición, me ha encantado aunque me pase como a Martina que no entienda ni papa, pero me conectará con mi querida hermana que actualmente reside en Marsella, Gracias de nuevo.
Qué gran entrada, Bea! Sin música, la vida sería más gris, sin lugar a dudas. Me alegra leer que alguien le dedicara un post entero a hablar de esto.
Hola!
Me llamo Isabel Núñez, he creado una página de seguidores de Zaz en España, ya somos 212 entre españoles, argentinos,. colombianos, franceses, alemanes..etcera..Os invito a uniros, es un gran placer poder disfrutar de Zaz!
Es en facebook: Zaz Followers, le club español..
Zaz la descubri este año y ya e tenido la oportunidad de acudir a su concierto en Évry (Francia), pude llegar hasta ella y hacerle ver que aqui la queremos mucho y queremos que vuelva pronto..aver si tenemos suerte este año que está a puntito de llegar!!
Besos!